Artículo publicado originalmente por VICE Estados Unidos.
Además de ser un abismo triste y desmoralizador, Tinder está plagado de mentirosos y embusteros, desde tipos ricos que le pagan a otras personas para ligar con ellos hasta los que lo usan para conseguir comidas gratis. Hay una extraña combinación de anonimato relativo, esperanza ciega y desesperanza en la app de citas que la hacen ideal para el engaño, algo que una joven de Nueva York aprovechó al máximo el fin de semana pasado, cuando consiguió realizar la estafa más grande en la historia de las citas por internet.
Según New York Magazine, Natasha Aponte plantó la semilla —o más bien, decenas de semillas— para su proyecto hace aproximadamente un mes, cuando hizo match con varios tipos en Tinder y les aplicó el mismo truco. Según un sujeto que afirma haber sido presa del engaño, el mensaje de la mujer decía algo como esto:
Le mando un mensaje y platicamos sobre el trabajo un rato, luego me dice "de hecho, tengo una presentación que dar en mi trabajo, ¿te ofenderías si te vuelvo a escribir en una semana o dos, cuando tenga tiempo libre? Eres lindo y quiero conocerte, sólo estoy muy ocupada.
Aponte abandonó la red durante unas semanas, pero luego reapareció y le preguntó a todos los tipos a los que les había enviado mensaje si querían reunirse con ella en Union Square, en la ciudad de Nueva York, para escuchar un DJ set y tomar un trago, en lo que aparentemente habría sido una cita uno a uno. Cuando los hombres se presentaron alrededor de las 6 PM del domingo para conocerla en persona, se encontraron perdidos en un mar de tipos que habían hecho match con Aponte en Tinder. Simplemente no lo sabían aún.
Llego a Union Square. Me como un hot dog y echo un vistazo por este lote vacío por 17th Ave y hay un escenario y un DJ y como 100 personas y cámaras y pienso, esto es algo totalmente al azar, típico de Manhattan.
En un video del encuentro masivo del domingo, puedes ver a decenas de tipos incómodamente parados alrededor de un DJ que toca un set en el escenario. Después de 35 minutos, Aponte se subió a la plataforma y por fin le contó a sus "citas" qué demonios estaba pasando:
Luego dice: los invité a todos aquí para una oportunidad de salir conmigo y luego va y da un discurso estilo Hunger Games sobre los requisitos para salir con ella
A TODOS ESTOS TIPOS LOS ENCONTRÓ EN TINDER Y LES MANDÓ EL MISMO MENSAJE
"¿Tienes lo necesario para competir contra todos aquí y ganar una cita conmigo?" Aponte preguntó a la multitud, provocando gritos de "qué mamada" y "cierra la boca" de unos cuantos tipos disgustados. Pero la mayoría de los sujetos se quedaron, sólo para que les dijeran, punto por punto, cosas que los descalificarían de la posible cita. Mientras dos "árbitros" examinaban a la multitud, Aponte anunció que no saldría con nadie que "sea un turista o no viva en este país", se llame "Jimmy", "busque sólo un encuentro casual", o mida "menos de 1.77 metros". Ah, tampoco buscaba "panzas cheleras, ni barbas largas, ni calvos, ni caquis, ni Toms".
Una vez que redujo el número de candidatos a través de una serie de "eliminaciones", supuestamente hizo que los hombres que no habían sido eliminados hicieran sprints y flexiones, luego los formó a todos y los fue aceptando o eliminando, contó uno de los hombres engañados a New York Magazine. ¡Y pensaban que el romance había muerto!
No está claro si alguien salió victorioso el domingo, o si Aponte realmente aceptó tener una cita con el vencedor. Según New York Magazine, este asunto es un poco sospechoso: desde entonces, Aponte ha vuelto privado su Instagram, se ha alejado de las redes sociales y cuando le preguntan sobre la estafa, pide que la gente se dirija a Rob Bliss Creative, un agencia de videos virales.
Claro, esto podría haber sido sólo un plan para alcanzar la gloria viral, pero fue uno excelente. Si acaso, valió la pena sólo por este tuit:
Todos en la multitud tienen la mirada baja y el gesto de EN EL NOMBRE DE SCOOBY DOO, QUÉ ES ESTA MIERDA
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