Artículo publicado originalmente por Broadly Estados Unidos.
Hay mil maneras de terminar una relación: por mensaje de texto, en persona, o simplemente desapareciendo. Para muchas personas, una ruptura, es el final definitivo: no quieren tener ningún tipo de contacto con su expareja. Sin embargo, para otros, una ruptura no es tanto un final sino un cambio, les gusta seguir en contacto porque esa persona es muy importante para ellos. ¿Pero cómo?
El tema de volverte amigo de tu ex ha sido polémico durante años. Y se ha vuelto más complicado por muchas razones. ¿Cómo saber si seguir en contacto o alejarte? En este artículo, exploraré, con la ayuda de un terapeuta profesional, los matices de pasar a ser amigo de tu ex, las herramientas que necesitarás y cómo saber qué es lo que te conviene.
Date un espacio
Darte un espacio es el mejor consejo y el que menos se lleva a cabo (incluso por mí, una columnista de consejos sobre relaciones). Pero para pasar de una relación romántica a una relación de amistad, necesitas espacio y tiempo para sanar. Por supuesto, depende de cada pareja, a veces hay niños de por medio, mascotas, autos o espacios compartidos, y eso hace que las cosas sean más difíciles. Sin embargo, mientras más espacio emocional y físico puedas tomarte, más rápido y menos doloroso será el proceso, incluso si al principio sientes que morirás por no hablar con tu ex. (No te vas a morir).
Avry Todd, un trabajador social clínico y terapeuta individual y de parejas, nos recuerda que para cerrar el ciclo necesitamos esforzarnos al igual que en las relaciones. "Todas las relaciones tienen un principio, un medio y un final", dice. “Ya sean relaciones a largo o corto plazo. Necesitamos esforzarnos al final al igual que lo hacemos al principio y a la mitad de la relación".
Todd señala que esto aplica sobre todo en las relaciones queer, porque "estar en una comunidad queer prácticamente garantiza que nos encontraremos con aquellos por quienes todavía nos late el corazón".
Por ejemplo, yo estaba viviendo con mi novia cuando terminamos así que no fue tan fácil como simplemente cortarla de mi vida (tampoco es que quisiera). Tener un espacio dentro de las limitaciones de nuestro departamento compartido significaba que teníamos que dormir separadas, pasar la noche en casa de algún amigo y salir de viaje los fines de semanapara poder llorar a gusto. Cuando recién estás haciendo la transición para salir de una relación, es importante encontrar tiempo para ti mismo, incluso en las redes sociales, y recordar que lo que sentimos no es para siempre. Es un cliché pero es verdad: todo pasa.
Terminar una relación muchas veces provoca sentimientos de temor, duda, ansiedad y problemas de apego, y es importante reconocer esos sentimientos, pero no dejarnos controlar por ellos. Entonces, si tu ex comienza a sentirse distante, intenta recordar que probablemente no es porque ya no le importes, sino porque necesitan cambiar su perspectiva de vida.
¿Y qué pasa si tu ex no se aleja? Aquí es donde se vuelve súper importante establecer límites. Es importante conocer tus límites para poder comunicarlos. Cuando hables con un ex que no se aleja, ten en cuenta que probablemente es un miedo a ser abandonado pero hazle saber cómo te sientes, porque el hecho NO establecer límites provoca resentimiento e incomodidad, y eso tendrá un impacto negativo en su relación a futuro. También descubrí que establecer un tiempo determinado puede ayudar a mitigar los temores de tu ex de que lo abandones. Por ejemplo, comprométanse a darse un espacio de 30 días. Cuando pase ese tiempo, vuelvan a evaluar si necesitan más espacio o si necesitan hacer algo diferente.
Considera tus motivos
Una vez que sientas que ha pasado suficiente tiempo y espacio, o sea, cuando pensar en tu ex ya no te duela, te enoje o te den ganas de vengarte, ¡Sigue tu camino hacia la curación! El siguiente paso es pensar por qué quieres ser amigo de esta persona. Un estudio de 2017 en la revista Personal Relationships identificó cuatro razones principales por las cuales las personas mantienen amistades con los ex: por seguridad (apoyo emocional, consejo, confianza), practicidad (posesiones o finanzas compartidas), civilidad y deseos románticos no resueltos.
Como era de esperarse, las relaciones de quienes intentaron ser amigos porque tenían sentimientos no resueltos y por civilidad no terminaron bien. Pero seguir siendo amigos por razones de seguridad y practicidad llevó a resultados más positivos. Por lo tanto, piensa detenidamente por qué quieres estar cerca de esta persona. Si tus motivos son, digamos, no tan ideales, probablemente necesites más tiempo para sanar o quizás no debas continuar con esa relación.
Qué podrían hacer juntos
Ya que te tomaste el tiempo necesario, pensaste en tus motivos y te sientes listo para ver a tu ex de nuevo, ¿qué deberías hacer? (O más precisamente, ¿qué NO deberías hacer?) La respuesta dependerá obviamente de tu circunstancia personal, pero aquí te damos unos consejos generales. Evita el consumo de alcohol o drogas, ya que es probable que terminen peleando o cogiendo. Encuéntrense durante el día, y en público, también frenará el impulso de pelear o coger. Reúnanse en un territorio neutral: no en restaurantes a donde solían ir juntos o lugares que tengan resonancia emocional. Piensa en el lugar menos erótico que te imagines y ahí véanse.
Mi ex y yo decidimos que el territorio neutral era el gimnasio, un lugar donde podríamos pasar tiempo juntas sin pelear. Además, ejercitarnos nos ayudó a quemar parte de la rabia que sin duda sentíamos la una por la otra porque no nos dimos el espacio necesario para curarnos. Pero, bueno, poco a poco.
Qué hacer cuando te encuentras con tu ex por accidente
Hay veces, por supuesto, que no quieres ver a tu ex, porque estas súper fachoso o cualquier cosa. En estos casos, Todd sugiere practicar la atención plena. “Si es alguien por quien aún sientes algo, usar la atención plena puede funcionar para saber qué hacer o eliminar la presión de reaccionar. Después de tomarte un momento, puedes considerar si quieres sonreírle y saludarlo, o simplemente seguir bailando con tus amigos o ir a llorar rápidamente al baño. A veces son las tres opciones al mismo tiempo o más".
A lo mejor necesitas huir. ¿Y sabes que? Eso también está bien. Todd dice: "Trato de ser honesto conmigo mismo sobre lo que necesito y rechazo cualquier tipo de expectativas".
No recaigas en malos hábitos, los límites son tus aliados
A medida que pasas un poco de tiempo con tu ex, es probable que viejas heridas salgan a flote. ¡Está bien! Eres humano. Lo más importante que puedes hacer es estar atento a esos sentimientos desagradables cuando ocurren para que puedas evitarlos la próxima vez. Por ejemplo, si te pone sobrenombres tiernos, o te manda mensaje 37 veces al día, o empieza a hablar de personas con las que estás saliendo, y sientes como si te hubieran sacado el corazón, ¡fíjate! y ponle un límite.
Establecer un límite no significa que las cosas permanecerán así para siempre. Pero es ser honesto y realista sobre tu situación en ese momento. Siempre puedes posponer el tiempo que necesitas para volver a verlo. Eso puede facilitarte todo el proceso.
Todd nos aconseja que intentemos reconstruir una conexión con una intención explícita. "Tómate tu tiempo, intenta resistir las expectativas de la(s) otra(s) persona(s) que alguna vez tuviste en cuenta mientras estabas con ellos, y manténte conectado a tus esfuerzos para individualizarte".
Los límites también son marcadores muy útiles cuando decides seguir con la amistad. Un ex que se propase con tus límites no va a ser muy buen amigo, y es importante que lo notes. Otra cosa que debes preguntarte es: ¿pasar tiempo con mi ex me hace sentir mal? Los investigadores de relaciones en el Instituto Gottman señalan que una relación "saludable" tiene cinco interacciones positivas por cada una negativa. No siempre somos nuestros seres más elevados y evolucionados cuando nos rompen el corazón, pero en general, tus interacciones deben ser bastante positivas. Si no lo son, entonces hay algo a lo que prestar atención.
Dicho esto, la mayor señal de que no deben seguir siendo amigos es simplemente que no quieres. No necesitas una explicación larga, la aprobación de un terapeuta o una lectura de cartas del tarot. Solo necesitas saber que ser amigo de esta persona no es algo que quieras o te sientas capaz de hacer.
Dicho esto, pruébalo y si te equivocas no importa. No significa que estés condenado o que no puedan "realmente" ser amigos. Probablemente significa, como lo indica el primer paso, que necesitas más tiempo para descubrir cómo estar con esta persona de una manera que se sienta bien para ambos. También recuerda que ninguna relación está exenta de dificultades.
Anna Pulley https://ift.tt/eA8V8J
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