Estamos a solo un episodio del final de la última temporada de Game of Thrones y el consenso general parece ser que los escritores no están realizando un buen trabajo. Es posible que los últimos episodios hayan tenido sus momentos, pero cada pequeño atisbo de brillantez —como esa borrachera sombría ocurrida la noche anterior a la Batalla de Winterfell, o la triste despedida de Tyrion con Jaime, o básicamente cualquier momento en el que Peter Dinklage está en pantalla— se siente ahogado por la mecánica apresurada de la trama, secuencias de batalla agotadoras y vasos de café. Y extras en llamas. Muchísimos extras en llamas.
Los arcos narrativos que hubieran tenido el tiempo de pantalla de una temporada completa en temporadas anteriores, como el breve y condenado romance de Jaime con Brienne, se aglutinan en algunas escenas rápidas y luego se desechan. ¿Euron Greyjoy? Asesinado por el Kingslayer en una de las peores peleas en pantalla desde Dorne. Incluso la mayor revelación de la temporada, la sorpresa de Daenerys como la Reina Loca, se sintió brutalmente apresurada, sin contar el hecho de que la serie ha estado anunciando el giro desde 2016. La serie que una vez pasó un episodio entero enfocado en tratar de cruzar un puente desapareció hace mucho tiempo. Y esta temporada con mucho espectáculo pero sin desarrollo de personajes, es lo que nos queda, al parecer.
Por supuesto, estamos hablando de Game of Thrones, así que las expectativas eran excesivamente altas en estos últimos episodios. Pero en este punto, es difícil no sentirse más que decepcionado, y parece que el elenco del programa nos apoya.
Una increíble compilación de YouTube apareció en línea el pasado fin de semana: tres minutos de los actores de Game of Thrones en entrevistas, intentando fingir emoción por la nueva temporada y fracasando... miserablemente. Puede que sean unos de los mejores actores de televisión de nuestra era, pero, a juzgar por estas imágenes, fingir que les gustó la última temporada de GoT —y los finales preparados para sus personajes individuales— es demasiado para ellos.
¿Vieron la sonrisa de dolor de Emilia Clarke cuando Entertainment Tonight le preguntó si estaba contenta con "cómo terminaron las cosas?" Es exactamente la misma cara que todos hicimos cuando la serie echó por la borda la profecía valonqar de Cersei o cuando nos dimos cuenta de que el enfrentamiento climático de Bran con el Night King consistió en Bran tomando un descanso bajo un árbol hasta la llegada de su enemigo.
Y luego está este video de Dinklage —el hombre que casi sin ayuda llevó esta temporada sobre sus hombros con sus habilidades de actuación— que intenta invocar un poco de entusiasmo, sin éxito, cuando habla sobre el final.
¿Acaso solo están jugando con nosotros? Tal vez. ¿Los videos se ven mucho más condenatorios sacados de contexto? Definitivamente. Pero estos no son los únicos ejemplos de miembros del elenco de Game of Thornes que se han quejado por cómo se están resolviendo las cosas.
Nikolaj Coster-Waldau, el actor que interpretó a Jaime Lannister, básicamente admitió en Vanity Fair que toda su trama secundaria con Brienne se sintió sumamente apresurada:
Pero si la decisión de Jaime de tener sexo con Brienne y luego dejarla se siente como un giro tan rápido que tu cabeza sigue girando, Coster-Waldau lo entiende: "Estamos acostumbrados a tener una temporada completa para llegar a algún punto. Ahora, de repente, muchas cosas suceden muy rápido". El actor dice que tiene que completar muchos detalles por su propia cuenta.
Y miren lo que Conleth Hill (quien interpreta a Varys) dijo en una reciente entrevista con EW:
¿Te decepcionó no tener una escena final con [el actor de Littlefinger, Aidan Gillen] el año pasado?
Estaba muy molesto por no tener una escena final con él. Me molestó no tener ninguna reacción ante su muerte, si él era mi némesis. Fue como me sentí en las últimas dos temporadas, cuando mi personaje se volvió más periférico y se concentraron más en los demás. Esta bien. Es la naturaleza de una serie de personajes múltiples. Fue algo frustrante. En general, ha sido una experiencia abrumadoramente positiva y brillante, pero supongo que las últimas dos temporadas no fueron mis favoritas.
Cuando el entrevistador le preguntó cómo se sentiría la audiencia con respecto al último episodio, Hill no sonó particularmente entusiasmado. "No tengo idea", le dijo a EW. "No sé cómo me siento".
Aún nos queda un último episodio antes de que Game of Thrones termine para siempre, al menos hasta la inevitable oleada de spinoffs y precuelas, así que, quién sabe, tal vez Weiss y Benioff puedan hacernos olvidar esta temporada dispareja con un final impresionante. Lo han hecho con anterioridad.
River Donaghey https://ift.tt/eA8V8J
No hay comentarios:
Publicar un comentario