El silencio como inicio…
Una habitación vacía presenta, entre luz y sombra, un estado de ánimo, un tono melancólico, un cierto momento mental.
Después, teclados y sintetizadores desfundan una fiesta sonora que le deja ver las costuras a un sonido que se ha construido bajo la influencia de los Pet Shop Boys, New Order y todas aquellas bandas que desde el Reino Unido, en década de los 80, le dieron forma y vida al pop electrónico.
De rojo y dorado, con la mirada centrada e intensa, aparece Mariana Montenegro apoderándose de un espacio en donde las rupturas y las grietas han sido cerradas, subsanadas por de oro y brillantes. El baile comienza y allí ocurre algo que es pura catarsis: baile, música y arte se encuentran para contarnos una historia.
“Música es una canción que compuse a partir de mi experiencia al mezclar y bailar. La letra habla de enfrentar ciertas problemáticas a través de la música, como si esta fuera la solución a los problemas”, advierte Mariana en una entrevista por correo electrónico. La música como terapia, el baile como ejercicio de liberación, el dance floor como teatro para la vida.
Recorriendo habitaciones, de repente, Montenegro, se encuentra o más bien se enfrenta a ella misma, su alter ego, a un imago con el que baila, al que le habla al que le canta “No verás mis ojos llorar, ni mi suspirar, ni mi palpitar, yo solo quiero música”. Clara analogía, clásica práctica para todos aquellos que encontramos en la música un poco de calma para tanto delirio.
“Hay dos emociones presentes que se van contrastando: lo oscuro y lo luminoso. Por esa razón es que quisimos hacer un video que involucrara dos personajes que se relacionan a través del baile”, agrega Mariana.
De la mano de Marcos Sánchez, artista, animador y realizador audiovisual chileno, Música, nos lleva a una suerte de thriller psicológico en el que el movimiento de cámaras y las transiciones focales dejan claro que hay dos entidades separadas en conflicto que se encuentran en una singular pista de baile. Esto, junto al trabajo de Rodolfo Robles en la construcción coreográfica, que toma amplias referencias de Maddie Ziegler, la adolescente que conocimos bailando ballet entre jaulas en las canciones de Sia, construyen un documento visual para tener en cuenta.
Música como respuesta. Música como terapia, puro Sanax en forma de beat, teclado y baile. Música, eso es lo que lleva el nuevo sencillo y video de la artista chilena Mariana Montengro que te presentamos a continuación.
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