Artículo publicado originalmente por VICE ASIA.
En lo que se especula que es el primer ataque en su tipo en la India, un hombre de 45 años llamado Benny entró en la casa de Amala, de 35 años, e hizo estallar una bomba suicida que los mató a ambos. Según los informes, el hombre hizo estallar una bomba fabricada en el país, hecha de palitos de una gelatina, que llevaba atada a sí mismo mientras abrazaba a Amala. Se rumora entre los vecinos que este incidente, que tuvo lugar el viernes pasado en el distrito de Naikatti de Wayanad, Kerala, se debió a una relación extramarital prohibida en la que la pareja estaba involucrada. Aunque las acciones del hombre los hicieron volar en pedazos, la hija de tres años de Amala, que se encontraba en el lugar, logró escapar de la escena ilesa.
Según la policía, la explosión ocurrió a la 1:30 pm en el porche de la casa de Amala, mientras su esposo Ilavana Nasar se encontraba en la mezquita. Benny era amigo de la familia de Amala y se conocían desde hacía ocho años. Pero después de varias advertencias por parte del esposo y los familiares de ella, se vieron en la necesidad de pedirle a Benny, dueño de la tienda de muebles local, que se alejara de ellos. Claramente, no pudo aceptar un no por respuesta.
Si bien los detalles exactos del caso aún son confusos y están bajo investigación, esas bombas caseras suelen ser utilizadas por los mineros y también los agricultores del lugar para mantener alejados a los elefantes y los jabalíes. El estado de Kerala ha sido testigo del uso despiadado de varias bombas en los últimos meses, como cuando fueron lanzadas a las sedes de un par de partidos políticos del país o, más recientemente, la que fue arrojada a un parque infantil, lastimando aun niño de 14 años.
Este caso no solo sirve como un recordatorio doloroso de que el amor literalmente puede lastimar, sino que también evidencia la aterradora realidad de la facilidad con que es posible conseguir explosivos en la India.
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