Paraguay no me mates es el título de la performance con la que Brune Almada Comas, con su proyecto Vena Rota, buscó denunciar la violencia y la discriminación contra el colectivo LGBTIQ+ en su país. Desarrollar un mecanismo de sensibilización. Ese es el objetivo que tiene desde que se volcó de lleno al artivismo, la forma que encuentra para resistir al desafío que supone existir siendo un cuerpo queer que cuestiona los paradigmas del género. “La gente ya no sabe cómo hacer llegar su mensaje de tanta apatía”, dice y pone en evidencia la situación de la comunidad disidente en un país en el que generar espacios es un problema porque “tiene toda una memoria histórica dictatorial de prohibir los encuentros y es una herencia ideológica”.
Desde hace cuatro años investiga las “reacciones de rechazo” de la gente frente a la transformación de su cuerpo y condensa sus observaciones en el espacio público, el gran anfiteatro social donde la homofobia también es parte de la audiencia. En 2018 el Ministerio Público de Paraguay lo acusó de “actos de exhibicionismo”, “abuso sexual de menores” y “actos homosexuales con menores” por desarrollar una acción artística en el Festival Besatón, organizado por SOMOSGAY, una fundación que defiende los derechos humanos. Recién en junio de este año, el juzgado le dio el sobreseimiento definitivo.
En ese tiempo, Comas, performero, artista y guionista, dio con la sustancia base de su reciente investigación: el valor de tejer vínculos de cuidado para ir ganando espacios. Ahora su búsqueda tiene que ver con salir de la manifestación yoica y que la expresión, con mayúscula, sea lo que impere. “El arte es para curarnos. Plantea la curación social y de uno mismo”, afirma en “Asumo”, un capítulo del proyecto documental Todo Mejora, que retrata a activistas paraguayos. El límite entre lo público y lo privado entra en cuestión, porque el territorio que se gana afuera, se gana también adentro. Cuerpo Político es el nombre de su nueva propuesta colectiva con la que quiere incidir en otrxs para poder vivir una existencia gozante. “Si las instituciones buscan amenazar nuestro arte o hacernos callar es porque lo que estamos diciendo es importante”, afirma y delinea así la fortaleza que está trenzando colectivamente para que la Ley contra Toda Forma de Discriminación sea posible en Paraguay en algunos, esperemos que pocos, años.
Brune es unx de lxs cincuenta líderes en disidencia sexual y de género cuya vida celebramos en nuestra quinta edición, ORGULLO.
A Inés la encuentras en Instagram y Twitter como @inesripari.
Inés Ripari https://ift.tt/3dqDSIP
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