Artículo publicado originalmente por VICE Reino Unido.
El confinamiento le ha arrebatado al mundo muchos placeres simples: recorrer mecánicamente las tiendas de prestigio en busca de maquillaje; el placer de fumar una gran cantidad de cigarrillos mientras bebes una gran cantidad de cerveza en la ruidosa terraza de un bar; la absoluta libertad de preocuparte por cosas absurdas sin que haya recordatorios constantes de que, en realidad, hay cosas mucho más importantes por las cuales preocuparte, como: una pandemia mundial.
Algo en lo que yo, en lo personal, no había pensado mucho, y me disculpo de antemano con la comunidad de "fanáticos de las montañas rusas", son las personas que adoran las montañas rusas. Qué emocionante debe haber sido para ellos escuchar que los parques temáticos, al menos en el Reino Unido, reabrirían el fin de semana pasado, aunque por supuesto lo hicieron siguiendo todas las pautas establecidas por el gobierno para evitar la propagación de COVID-19.
El domingo, el fotógrafo Chris Bethell fue a Alton Towers, el más grande de los parques temáticos de Inglaterra, para documentar cómo luce exactamente durante la pandemia.
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