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viernes, 28 de agosto de 2020

¿Por qué siento que tengo flemas todo el tiempo?

Artículo publicado originalmente por VICE Estados Unidos.

¿Alguna vez has sentido que necesitas aclararte la garganta porque tienes unos mocos que quieres escupir o tragar? A eso se le conoce como la descarga o goteo nasal posterior y, en mi caso, ocurre bastante a menudo. Creo que he tragado flemas al menos tres veces mientras escribía esta frase. ¿Pero por qué ocurre esto? Y si a ti te pasa lo mismo, ¿qué puedes hacer para solucionarlo?

Por qué se produce el goteo nasal posterior

Aunque el goteo nasal posterior me parece molesto, en realidad es un mecanismo de protección importante. Se produce por las membranas mucosas de la nariz, nos explica David M. Poetker, profesor del Departamento de Rinología del Colegio Médico de Wisconsin.

“A menudo pensamos que la nariz sirve solo para oler, pero el sentido del olfato es de las funciones menos importantes”, dice Poetker. “Es una fase del sistema respiratorio en la que se calienta y humidifica el aire que respiras”. Este aire normalmente tiene una humedad de entre el 50 y 60 por ciento, pero cuando entra por la nariz, aumenta a casi un 90 por ciento de humedad y se adecua a la temperatura del cuerpo, dice Poetker. Esto optimiza el intercambio de aire en los pulmones.

“El ejemplo que siempre pongo a mis pacientes es cuando sales a dar un paseo por la mañana en Wisconsin en enero y aspiras profundamente a través de la boca. Te hace daño y empiezas a toser”, continúa, “mientras que, cuando aspiras despacio a través de la nariz, el aire entra caliente y humidificado, y no te hace daño”.

La mucosa nasal también atrapa el polvo, el polen y la contaminación, dice Poetker. Estas partículas invasoras se quedan atrapadas en la mucosa y se expulsan por la garganta, en vez de ir directos a los pulmones, donde podrían provocar una irritación. La membrana mucosa no solo tiene glándulas mucosas, sino que también posee unas fibras capilares finas en las células ciliadas, que tienen un papel importante en el proceso natural de limpieza conocido como aclaramiento mucociliar, dice Poetker.

“Se produce la mucosidad y las fibras capilares la empujan al final de la garganta. Todos los senos paranasales dirigen el drenaje a la parte trasera”, explica Poetker. “Es decir, no está diseñado para drenar por el frente y por eso se produce el goteo nasal posterior”.

De media se segrega alrededor de un litro de mocos al día, pero puede aumentar bastante si se produce un exceso, añade Poetker.

¿Por qué a veces segregamos muchos mocos?

Si eres alérgico a algo y se te queda en la mucosa, las cavidades nasales se irritan, dice Mas Takashima, director del Sinus Center en el Colegio de Medicina de Baylor. O, si vives en una zona con mucha contaminación, las partículas se pueden quedar atrapadas en la nariz y provocar problemas similares. “El cuerpo dice: “eh, hay algo que me está irritando la nariz; tengo que expulsarlo”, explica Takashima. “Entonces empieza a producir mucha mucosidad para limpiar la nariz”. La sinusitis y los resfriados también pueden favorecer una sobreproducción de mocos.

¿Cuándo es demasiado? “Normalmente le digo a mis pacientes que cuando puedes notarlo, es demasiado”, explica Poetker. “O bien hay mucho más volumen de lo normal o es mucho más espeso de lo que debería ser”.

Puede ser muy molesto notar constantemente el goteo nasal posterior y varias investigaciones demuestran que puede estar asociado con la tos crónica. Cuando te tumbas o duermes y tienes mucho goteo nasal posterior, la mucosidad puede llegar a la tráquea y a los pulmones, dice Takashima, y puede irritar los tejidos pulmonares y provocar un ataque de tos.

El dolor en la garganta y en el oído también puede ser síntomas secundarios del exceso de goteo posterior nasal. “En algunos pacientes, esa irritación constante de la parte anterior de la garganta puede ser motivo de un dolor significante en esa zona”, dice Takashima. Los mismos nervios que hacen que te duela la garganta también pueden hacer que te duelan los oídos, así que en algunos pacientes se ven otitis, pero Takashima cree que el problema es en realidad el exceso de mucosidad en la garganta.

La ronquera también puede ser un problema derivado del exceso de goteo nasal posterior, dice Poetker. Esto puede ser un problema para la gente que necesita hablar mucho a diario, como los profesores, médicos o la gente que trabaja de cara al público.

¿Qué se puede hacer?

Si el goteo nasal posterior te molesta, acude a tu médico para que te ayude a identificar la causa y encontrar un tratamiento para ralentizar el goteo. Pero no pararlo de golpe, porque como Poetker explicaba es una función de protección importante.

Las alergias son lo primero que se deben considerar: el exceso de goteo nasal posterior es un síntoma común de la rinitis alérgica, según muestran estos estudios. En Estados Unidos, la rinitis alérgica afecta a entre 40 y 60 millones de personas, según el Colegio Americano de Alergias, Asma e Inmunología. Si sueles tener otros síntomas de la alergia y crees que esta podría ser la causa del goteo nasal posterior, tu médico podría recomendarte un aerosol nasal de corticosteroide, como la fluticasona, o un antihistamínico en aerosol, dice Poetker. Puede ser de gran ayuda, pero tardarás semanas o meses en notar la diferencia.

Hacerse la prueba de las alergias también es recomendable, dice Poetker. “Si no se sabe con seguridad o si hay algo que el paciente podría evitar fácilmente y mejorar los síntomas”, explica, “entonces merece la pena hacerse la prueba”.

El reflujo gastroesofágico también puede ser un problema para los pacientes con sinusitis crónica o goteo nasal posterior, señala Poetker. “Aclararse la garganta también podría ser un síntoma del reflujo por la cantidad de mucosidades que hay en las cuerdas vocales o incluso por una inflamación”, dice. En ese caso, los tratamientos para el reflujo podrían ser la mejor opción.

En algunas personas, la contaminación del aire también puede propiciar los problemas del goteo nasal posterior, dice Takashima. “Por supuesto, las alergias son el problema del que más se habla, pero si vives en una zona con mucha contaminación, puede haber muchas partículas en el aire que irriten la mucosa nasal”.

Si tienes alergia, date una ducha antes de ir a dormir, especialmente cuando la contaminación y los niveles de ozono son elevados, dice Takashima. “Sé que a mucha gente le gusta ducharse por la mañana, pero en realidad tiene más sentido antes de ir a dormir”, dice, “porque si no, todo el polen que llevas en el pelo y en la piel se quedará toda la noche en la cama y podría potencialmente irritarte”.

Takashima también recomienda que algunos pacientes se hagan un lavado nasal con una solución salina. Estos lavados pueden eliminar los irritantes que se encuentran en las fosas nasales, dice Poetker. Si tienes una nariz sensible, compra productos que vengan en un contenedor de metal presurizado y así se evitan los preservativos de los de plástico, que también podrían ser irritantes.

Aunque es menos común, los problemas nasales pueden ser causados por un fallo de comunicación entre el cerebro y la nariz. “Otra cosa que a veces vemos es que el cerebro ordena a la nariz que produzca más mocos de los que debería. A esto se le conoce como rinitis no alérgica”, dice Takashima. “No sabemos por qué ocurre, pero en algunas personas se da tras hacer ciertas actividades como el ejercicio o comer, o cuando el aire es frío, cosas que podrían estimular al cuerpo a producir más mocos de lo que debería. El tratamiento es completamente diferente al de las alergias”.

Si tu doctor sospecha que tienes una rinitis no alérgica, quizás te pida que pruebes un aerosol nasal especial que bloquea los nervios defectuosos que conectan el cerebro y la nariz, dice Takashima. Quizás también te ofrezca un nuevo tratamiento en el que se usa nitrógeno líquido para aturdir los nervios de la nariz y reiniciarlos y que así se produzcan menos mocos, dice Takashima. Otro tratamiento utiliza el calor para reducir las partes que producen los mocos.

“Si nada sirve, ve a ver a un otorrinolaringólogo para comprobar que otras opciones tienes”, dice. “Como con todo, siempre recomendamos primero las opciones menos invasivas y luego ya vamos aumentando. Si hay una forma simple de tratarlo, hazlo. Pero si nada te funciona, o el tratamiento es de por vida, habla con tu doctor para ver qué otras opciones hay disponibles”.

Si solamente drenas por un lado, acude al otorrinolaringólogo, porque podría ser un síntoma de un problema que se conoce como fuga de líquido cefalorraquídeo, explica Takashima. También puede producirse por unos implantes dentales, dice. Cuando los implantes se colocan en el hueso molar superior, puede pasar fácilmente al seno que está detrás de la mejilla. “Si has estado en el dentista recientemente y de repente tienes problemas nasales en el lado donde están los implantes, deberías ir a ver a un otorrinolaringólogo”, dice.

Por mi parte, sospecho que las alergias son la causa de mi goteo nasal posterior. He decidió acudir al médico para consultarlo y, mientras, probar un aerosol con una solución salina. Una cosa más: la gente con niveles de estrés altos también puede presentar un goteo nasal posterior, según sugiere un estudio, así que lo añadiré a la lista de razones por las que debería meditar más a menudo.

Julie Stewart https://ift.tt/eA8V8J

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