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viernes, 4 de enero de 2019

¿Cómo lidiar con el miedo a la muerte?

Artículo publicado originalmente por Tonic Estados Unidos.

Tenía 26 años. Empecé a ver cómo mi tez clara se oscurecía a gris y luego a negro. La piel se me empezaba a caer en parches húmedos que eran absorbidos por la tierra. Entonces me convertí en huesos. Aquellos, también, se deterioraron hasta llegar a ser finos granos que fueron recogidos por el viento. Y entonces ya no estaba ahí. Donde había estado mi cuerpo, ya solo había tierra.

profesionales.

Así fue una meditación guiada sobre la muerte a la que asistí, dirigida por un monje budista. Mi respuesta fue visceral. Asco. Consternación. Temor. En algún punto, simplemente no lo entendía. Era joven, saludable y hermosa, y estaba bastante segura de que no iba a morir pronto, e incluso si lo hiciera, probablemente sería un accidente horrible. Nunca presenciaría esa suave decadencia de mi cuerpo o su reintegración en la tierra.


Esa experiencia era impensable para mí; la mayoría evitamos pensar en nuestra propia muerte. Simplemente no pensamos en eso. O lo pensamos logísticamente y legalmente: ¿Quién se quedará con mis cosas y quién cuidará de mis gatos? La decadencia de nuestros cuerpos no es nuestra preocupación. Quedará en las manos de profesionales.

Sin embargo, no pensar en nuestra muerte no nos beneficia en absoluto. De hecho, podría hacernos daño. Pensar en la muerte podría hacerte más feliz.

¿Cómo lidiar con el miedo a la muerte?

Hay dos tipos de fobias alrededor de la muerte: la necrofobia, que es el miedo a las cosas muertas y las cosas asociadas con los muertos (funerales, cementerios), y la tanatofobia, que es el miedo a la muerte de uno mismo. Puedes vivir una vida satisfactoria con cualquiera de las dos fobias si tienes las habilidades adecuadas para sobrellevar la situación.

Un buen punto de partida, si puedes hacerlo, es encontrar un terapeuta que tenga experiencia en el tratamiento de la ansiedad y las fobias. Puede ser útil comprender de dónde proviene tu miedo particular a la muerte. Muchas veces, hay un trauma asociado con el miedo, ya sea la pérdida de un ser querido o haber estado a punto de morir. Independientemente, un terapeuta puede adaptar un plan de tratamiento para ti y tu ansiedad específica.

Dos cosas que puedes probar por tu cuenta:

  1. Escribir un diario: reflexiona sobre una pregunta o pensamiento con cinco o diez minutos de escritura (o más). Llevar un diario te dará el espacio para reflexionar sobre tu miedo. También puedes considerar desafiarte a ti mismo para contrarrestar la oscuridad escribiendo sobre cosas por las que estás agradecido.
  2. Grounding: esta es una técnica de atención plena que te ayuda a entrar en el momento y puede distraerte de los pensamientos angustiantes. Escucha una canción con atención y observa las letras o el mensaje que deja, acaricia un animal, sostén un cubito de hielo y mira cómo se derrite. Céntrate en tus sentidos y en tu entorno, dándote espacio para aceptar tus pensamientos sin juzgarlos.

Si te encuentras en una situación en la que te enfrentas a cuidados paliativos terminales debido a una enfermedad, puede ser útil conversar con tu familia sobre un plan, ya sea sobre cuánto tiempo te gustaría estar en soporte vital o qué tipo de celebración o funeral te imaginas. Tener un plan y saber que se llevarán a cabo tus deseos puede brindarte una sensación de comodidad y control.

Pensar en la muerte da miedo, es definitivo, y lo que viene después es desconocido, ya sea que creas en la otra vida o no. Sobre todo, llegar a un acuerdo con la muerte como parte de la vida es importante para superar el miedo.

Rachel Aredia es terapeuta y miembro de ADAA.

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