Artículo publicado originalmente por VICE Estados Unidos.
El Centro contra el Cáncer de la Universidad de Kansas ha perdido un colon y realmente quisiera recuperarlo. La semana pasada, unos ladrones cobardes robaron el gigantesco colon inflable del Centro contra el Cáncer —valuado en 4,000 dólares— de la parte trasera de una camioneta en Kansas City, informó The Wichita Eagle. Entre esta pieza y aquella nariz gigante que alguien se robó de un pórtico en Portland la semana pasada, parece que tenemos unos delincuentes preparándose para armar un cuerpo completo.
El colon estaba en camino a una carrera de objetos inflables, donde la Coalición contra el Cáncer planeaba usarlo para enseñar a algunos corredores sobre el cáncer de colon. Por desgracias, los participantes tendrán que encontrar otras formas menos divertidas de aprender sobre la salud intestinal de ahora en adelante.
"El examen de detección del cáncer colorrectal es el arma más poderosa que tenemos contra este tipo de cáncer", dijo en un comunicado el oncólogo quirúrgico del Centro contra el Cáncer, John Ashcraft. "El cáncer de colon es un tema difícil para muchos, y el colon inflable gigante de 68 kilos y tres metros de largo es un excelente tema de conversación".
No está claro por qué, exactamente, los ladrones robarían un colon inflable masivo, ya que probablemente hay maneras más baratas y menos asquerosas de iniciar una conversación que no impliquen estafar a un laboratorio universitario contra el cáncer. ¿Acaso los ladrones estaban preocupados por el riesgo de cáncer de colon y esperaban que una inspección detallada del funcionamiento interno del intestino mejorara sus posibilidades? ¿Están llevando a cabo algún tipo de fiesta realmente alocada? Si esperaban poder usar esto como una casa inflable improvisada, se sentirán muy decepcionados una vez que el colon explote.
El Centro contra el Cáncer ya comenzó a recaudar fondos para reemplazar el colon, pero actualmente están muy lejos de su objetivo final. Con suerte, los ladrones del colon se darán cuenta de la importancia de crear conciencia sobre el cáncer y regresarán el original. Si realmente quieren pasar el rato en un intestino gigante, deberían ir a beber un poco de vino dentro de ese gran ano en Bélgica y darse por bien servidos.
Si viven en Kansas City y se dan cuenta de que aparece un globo grande, rosado y venoso en el patio trasero de su vecino, llamen a la policía. El personal del Centro contra el Cáncer de la Universidad de Kansas estará siempre en deuda con ustedes, lo cual probablemente sea una buena idea, por si acaso.
River Donaghey https://ift.tt/eA8V8J
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