Artículo publicado por VICE Colombia.
En Ecuador, un vicepresidente condenado a seis años de prisión por recibir dineros de Odebrecht para darle a cambio facilidades a la hora de firmar contratos públicos. En Brasil, el primer expresidente condenado por otorgar contratos multimillonarios a Odebrecht a cambio de sobornos. En Panamá, 68 procesados por recibir coimas de Odebrecht —entre ellos varios exministros— y los dos hijos del expresidente encarcelado por corrupción dados a la fuga. En Perú, una excandidata presidencial investigada por recibir dineros de Odebrecht para financiar su campaña política. Y la lista sigue y sigue y sigue…
Hoy en día, parece que lo único que nos une realmente como continente tiene nombre y apellido: Odebrecht y corrupción.
La constructora brasileña, que aparece en las noticias semana tras semana por su cantidad de ollas podridas que se siguen destapando, se ha convertido en el gran símbolo de lo cagados que estamos gracias a la codicia de nuestros honorables líderes políticos. Sin embargo, países como Venezuela o Colombia han probado que se podía llevar este escándalo más allá, consagrándose como los grandes maestros del tapen—tapen. Así, mientras que en otros países se dictan condenas inéditas a peces gordos de la política, por estos lares Nicolás Maduro, Juan Manuel Santos y Óscar Iván Zuluaga, todos empapados por dinero de los brasileños, viven relajados y con sus investigaciones bien archivadas.
¿Podríamos esperar algo más?
Pues claro, amigos, mucho más. Por eso no ha sido tanta la sorpresa que en Colombia, tierra querida y hogar del fiscal anticorrupción corrupto, ahora se haya invitado a los adalides del tema para que participen en una cumbre anticorrupción en la capital. Y es verdad, el próximo lunes 22 de octubre, Margarida Smith, representante de Odebrecht, dirigirá una conferencia en la Tercera Cumbre Andina Anticorrupción titulada "Lecciones aprendidas". Poesía pura.
¿Llegarán con cara de perritos regañados? ¿Nos demostrarán de una vez por todas que todo se fraguó a sus espaldas? Lo sabremos dentro de poco. Por ahora, nos imaginamos que será algo magnífico, como el capítulo de South Park en el que la multinacional BP pedía perdón por liberar al señor de las tinieblas Cthulhu de las profundidades del océano.
Seguro ustedes también lo sienten señores de Odebrecht, tranquilos.
Eduardo Santos https://ift.tt/eA8V8J
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